-¿Alguna vez imaginó que llegaría tan lejos? -le preguntó un
ninja a mitad del camino.
La pregunta le dejó absorto. ¿A qué se refería?
-En verdad, usted nunca pudo saber al cien por cien que llegaría
a tal posición, ¿verdad, Hokage-sama?
-¿Por qué me preguntas eso, Tatsu?
-Solo quisiera saberlo… si no le importa.
-Claro, claro -dijo Naruto pensando que Tatsu pensó que él
se había enojado.
-¿Y bien?
-A sí -seguía siendo algo despistado-. Tienes razón, Tatsu,
nunca supe que algún día llegaría a ser Hokage, pero sabía que lo conseguiría.
-… ¿No se está contradiciendo?
-Yo creo que no… -pensó en sus palabras-. ¿Tú puedes saber
lo que te va a suceder mañana? ¿Sabes si recibirás un regalo de alguien? ¿O si
te tropezarás con esa piedra?
-…No -dijo Tatsu no muy convencido.
-En efecto, no lo sabes, pero, ¿confías en qué mañana no te
tropezarás con esa piedra?
-Si no vuelvo por este mismo camino, no lo haré. Podría
contestar que sí.
-¿Y estás seguro que no volverás? Por alguna razón, puede
que cruces y te puedas caer por esa piedra.
-¿Y cómo lo evito, Hokage-sama?
-Esforzándote -respondió con total seguridad-. Esforzándote
mucho, confiando en que lograrás no caerte por culpa de esa piedra.
-¿Y eso que tiene que ver con que usted pensó que llegaría a
ser Hokage?
-Mucho. Yo decía que llegaría a ser Hokage. Lo decía una y
otra vez porque era mi sueño. Fui comprendiendo que para conseguirlo, el camino
no sería fácil. Tendría que trabajar, esforzarme y no tirar la toalla solo por
un error en alguna misión. No sabía que lo llegaría a ser. No veo el futuro.
Pero mi interior me decía que si lo soñaba con tanta intensidad y trabajaba
duro, lo conseguiría y, por tanto, sabría que lograría ser Hokage.
-Y aquí ha llegado.
-Exacto. Y si tú quieres viajar por todo el mundo ninja, lo
harás, pero ten en cuenta que no será nada fácil. Ir de un lugar a otro puede
costarte la vida. El único obstáculo eres tú mismo.
-Vaya -Tatsu se sorprendió con las palabras del Hokage
Naruto a quién tanto quería. Esbozó una gran sonrisa y le brillaron los ojos de
la emoción-. ¡Sí, lo conseguiré!
-¡Así se habla Tatsu! ¡Lucha por tus sueños!
Los dos prosiguieron con el viaje, aunque al dar dos pasos,
Naruto le advirtió:
-Pero como no dejes de dirigirte a mí como ‘usted’, quien
primero te intentará impedir que no viajes, seré yo, ¿de acuerdo?
Tatsu asintió rápidamente y los dos rieron intensamente. Para
Naruto, ser Hokage era lo más increíble que le había pasado, pero siempre sería
y se comportaría como uno más de entre los ninjas de otro rango.